Las ocho reglas de un abogado

1) Sobre la primera, las palabras se las lleva el viento. Entre el momento en que ocurren los hechos y la práctica de un juicio, puede pasar mucho tiempo, y las cosas se olvidan, la memoria falla, y la mejor forma de guardarlos es en un escrito. La confianza entre las partes se reafirma en un escrito y este es la mejor prueba de ello. Siempre se debe dejar constancia por escrito de toda actuación.

2) Sobre la segunda, nuestro trabajo es leer, es constatar que el escrito contenga lo que ocurre y lo que se acordó. Se debe evitar los engaños y los malos entendidos.

3) Sobre la tercera, es más económico en tiempo, esfuerzo y costos, un buen acuerdo que se cumpla, que iniciar un juicio. La gente necesita solucionar sus problemas, no enredarlos más. 

4) Sobre la cuarta. Un acuerdo permite continuar las relaciones, una contienda o un conflicto rompe cualquier tipo de relación e incrementa los odios.

5) Sobre la quinta: No hay que tomarse nada personal, cada quién esta haciendo su trabajo. Lo cortez no quita lo valiente, hoy nos enfrentamos, mañana podemos ser aliados, y mañana podemos necesitar de la ayuda de quien hoy queremos insultar. Maneja tu inteligencia emocional. 

6) Sobre la sexta:  Si no sabes del tema, puedes equivocarte y poner en riesgo a tu cliente o a la empresa que representas. Los errores son costosos. 

7) El abogado nunca deja de estudiar, las leyes, la jurisprudencia cambian, y el abogado se debe actualizar, y debe innovar. La labor de un abogado no es obedecer ciegamente a las leyes, es buscar y hacer justicia, y ello hace que unas veces debas estar en contra de las leyes y proponer otras soluciones más justas y razonables. El derecho depende de la inteligencia de los abogados. 

8) No se puede trabajar gratis. Nuestro tiempo, nuestro conocimiento, y nuestro esfuerzo debe ser remunerado en una justa medida y que nos permita vivir bien. No en vano nos toca apersonarnos de los problemas ajenos, los enemigos ajenos y cargar las rabias ajenas, para tratar de solucionarlos o por lo menos de mejorar la situación.