LA JURISPRUDENCIA Y LOS LITIGANTES
Son las mismas leyes, los mismos Códigos y la misma jurisprudencia, y los mismos funcionarios, pero solo los juristas tienen la capacidad de cambiar los precedentes judiciales.
El jurista reta constantemente al juez a variar su posición, lo confronta a tomar otra opción legal, interpreta la ley y los precedentes de manera diferente, utiliza otros argumentos, cambia las pruebas o su interpretación.
Un jurista trabaja en una línea jurisprudencia, y si no la hay la construye, la analiza, la utiliza, la crítica, y propone formas para mejorarla, porque aprende sus fortalezas y debilidades.
El jurista no se queda con lo que hay, ni se conforma con la decisión basada en un precedente. Estudia la doctrina, el derecho comparado, se apoya en peritos de otras áreas, encuentra la falla y ataca con lógica, ciencia y razón.
Muchos abogados pueden leer las leyes y la jurisprudencia y citarla de memoria, pero pocos tienen la capacidad de un jurista, de ver más allá de la norma.
Comentarios
Publicar un comentario